Actualidad
Portada » Actualidad » Análisis FGE de la actualidad comunitaria »
Reglamento relativo a la restauración de la naturaleza
A pesar de que la UE lleva varias décadas protegiendo la naturaleza sobre la base de la Directiva Hábitats y de la Directiva Aves , el Informe sobre el estado de la naturaleza publicado por la Comisión Europea en 2020 señala que todavía no sea logrado “frenar el declive de las especies y tipos de hábitats protegidos que son motivo de preocupación para la UE por motivos de conservación”. Se puede señalar, por ejemplo, que el 81% de los hábitats está en mal estado, entre el 60% y el 70 % de los suelos no está sano y una de cada diez especies de abejas y mariposas se encuentra en peligro de extinción .
La Estrategia sobre Biodiversidad para 2030, en su intento de frenar esta situación, propone un Plan de Recuperación de la Naturaleza de la UE con una serie de compromisos, entre los que destaca la presentación de una “propuesta sobre una serie de objetivos de la UE en materia de restauración de la naturaleza, jurídicamente vinculantes, con la finalidad de recuperar ecosistemas degradados”. Tal posibilidad fue refrendada por el Consejo en sus conclusiones de octubre de 2020 .
Entre sus objetivos también se encontraba el de velar por que no se produzca ningún deterioro en el estado de conservación de las especies y los hábitats protegidos y que “al menos el 30% de las especies y hábitats que en la actualidad no presenten un estado favorable alcancen ese estado o muestren una decidida tendencia positiva hacia dicho estado de aquí a 2030”.
Como resultado del impulso proporcionado por la Estrategia sobre Biodiversidad, la Comisión Europea propuso, en junio de 2022, un Reglamento sobre la restauración de la naturaleza. Un año después, Consejo y Parlamento aprobaban su orientación general y su posición en junio y julio, respectivamente, para alcanzar un acuerdo político provisional bajo la presidencia española del Consejo, en noviembre de 2023. Tras un intento fallido en marzo de 2024, el Reglamento fue finalmente ratificado en el Consejo de Medio Ambiente llevado a cabo el 17 de junio de 2024.
El Reglamento relativo a la restauración de la naturaleza se corresponde con el primer acto jurídico europeo que regula medidas de restauración y no solo de conservación de la naturaleza. El texto se basa en la idea de que la restauración de los ecosistemas es fundamental para luchar contra el cambio climático, reducir los riesgos para la seguridad alimentaria, garantizar la salud humana y fomentar la economía .
El Reglamento también facilitará el cumplimiento de la UE con sus compromisos internacionales en materia de biodiversidad, como el Marco Global para la Diversidad Biológica de Kunming-Montreal, adoptado en diciembre de 2022. Este contiene una serie de metas globales que deben ser alcanzadas en 2030. Entre estas, figuran la conservación de al menos el 30% de las zonas terrestres, de aguas continentales y costeras y marinas, así como la restauración del 30% de los ecosistemas degradados y la reducción a la mitad de la introducción de especies invasoras.